Bosque encantado

Hay un punto de no retorno
que a veces se llega
sin querer
como el tiempo de las olas
nunca se repite
nunca es igual
nunca son dos iguales
y arrasa con todo
con las voces
con los amantes
con los corazones
hay un tiempo
para el no retorno
que puede ser largo
o corto
pero siempre hay uno
al igual que el punto
de retorno
puede ser largo
o corto
siempre hay uno
hay jardines que se
pierden en otoño
y otros que renacen
hay un bosque encantado
una sombra delante de la luna
hay un sol
que no deja ver
y la tierra arde por su
Instinto
buscando fecundar
la vida.
Juan Manuel Álvarez Romero,© Mané

Abre esa hora

Ábreme esa hora
te mezclaré con una
gota de mar
y otra de sol
te mediré los tiempos
de la noche
y del Alba
abre tu tiempo
y abriremos
nuestros anhelos
nuestras manos
nuestros cuerpos
a la luz tenue de la luna
sobre la tierra húmeda
del día
abre la puerta
del tiempo perdido
de las noches en vela
de las ausencias
de caricias
abre la puerta del tiempo
cierra la puerta del ayer
y de la oscuridad
para que la fuerza de la tierra
nos atraviese
para que las tormentas
se disipen
sobre nuestro tiempo
abre la hora
de las musas
y los dioses
de las cuevas de hadas
de las sirenas
y de los nenúfares
y bañémonos en mar
de las horas
olvidadas
Juan Manuel Álvarez Romero©Mané

No hay lugar

No existe un lugar
para borrar tu memoria
no hay sitio
para el anhelo
no existe tampoco
un hueco para el olvido
ni para buscar otras caricias
no hay memoria capaz en mi corazón
de imaginarte en otro lugar
mi olor es tu olor
mis manos son tus manos
al igual que mis pies
y mi alma
no hay poesía
sin ti
ni colores
no existe un mañana
ni otros lugares
lejanos
ni paraísos
ni canción
ni armonía
donde pueda
huir sin ti
no cabe el aire
en mi pecho
ni hueco donde
lata mi corazón
ya no hay lágrimas
ni sangre que corra
por mis venas
ya ni tiempo
donde refugiarme
de tu ausencia.
Juan Manuel Álvarez Romero©Mané

Algún día

Poema leído por Angela Serna, poema Algún día

Algún día la luz se detendrá en forma de luna,
y la luna quedará colgada del cielo, como una lámpara maravillosa…
cuando la luna quede colgada en forma de lámpara maravillosa,
las estrellas se confabularán para nuestro encuentro…
el mar será de cristal, para que podamos caminar sobre él…
la tierra será tan fértil, que todo será de un verde eterno…
el cielo será nuestra casa…
las luciérnagas nos alumbrarán los caminos
Y cuando esto ocurra, abriremos nuestras alas y volaremos
sobre las montañas más hermosas, jamás soñadas
Y ya no habrá que volver… a ningún lugar,
porque el lugar, seremos nosotros dos.
Juan Manuel Álvarez Romero©